El desfinanciamiento del cine argentino y el rechazo hacia las políticas culturales fueron algunas de las marcas de este primer año de gestión de la Libertad Avanza. Un repaso a las medidas del Gobierno que afectaron al cine, la importancia de las plataformas de streaming para la visibilización de los artistas argentinos en el mundo y la supervivencia de los realizadores independientes del conurbano.

Por Isabel Escalada*

 

Javier Milei ya había dado a conocer cómo gestionaría la cultura durante su campaña electoral y no mintió: desde que comenzó su mandato en diciembre de 2023, el cine nacional se vio en peligro.

A 20 días de asumir el poder, el Presidente presentó la “Ley Ómnibus”, que proponía cerrar el ENERC (Escuela de Experimentación y Realización Cinematográfica) y eliminar la cuota de pantalla nacional que fijaba los porcentajes de exhibición para el cine argentino. En mayo, cerró temporalmente el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y dejó sin trabajo a cientos de personas, paralizando a su vez las producciones nacionales. A su vez, el Gobierno designó como director del organismo a Carlos Pirovano, un economista ajeno al área cultural que promulgó que la financiación para el fomento de las películas baje del 50% al 20%.

Además, las y los cineastas independientes se vieron afectados por otras nuevas medidas: la exigencia de contar con el 50% de financiamiento privado de antemano, antes de elevar un proyecto al INCAA, y la limitación de que se pueda presentar solo un solo proyecto por año.

Realizadores audiovisuales y amantes del cine salieron a protestar, no solo en las calles, sino también en grandes festivales internacionales, como lo son el de San Sebastián, Cannes y Mar del Plata. A su vez, la primera entrega de los Martín Fierro de cine fue el espacio para alzar la voz en defensa de la cultura argentina.

A pesar de que el resumen sobre lo que hizo o quiso hacer este Gobierno es devastador para la cultura nacional, hay que tener en cuenta que muchas veces solo fueron amenazas que terminaron sin efectos prácticos por la falta de planificación para lograr su cometido.

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Hoy el cine se solventa con financiamiento privado y las plataformas de streaming fueron una segunda oportunidad para el séptimo arte nacional, ya que produjeron series y películas que lograron reconocimiento mundial.

Para entender cómo funciona y cómo lo vive un realizador que tiene la posibilidad de trabajar con una plataforma de streaming, Cordón le consultó al resonado director argentino del último año, Alejandro Hartmann, reconocido mundialmente por dirigir el documental más visto de octubre en Netflix, “Los hermanos Menéndez”.

“Netflix y Amazon no vienen por nuestro mercado, vienen por nuestro talento, y ese talento se formó gracias a toda esa inversión estatal a lo largo de muchísimos años. En cambio, ahora se hace un corte de manera violenta y sin planificación. Lo que hay es definitivamente una motosierra y vamos a ver las consecuencias, no creo que sean permanentes, pero durante un tiempo va a ser difícil”, estimó el también director de “El fotógrafo y el cartero: El crimen de Cabezas”.

A su vez, el realizador criticó: “Los apoyos del INCAA son como un chiste y lo más llamativo es que es totalmente contradictorio con lo que reclama el Gobierno, porque supuestamente les interesa que haya películas de calidad, que compitan y convoquen público, pero es imposible hacerlo con el 1% del presupuesto de una película de plataforma. No hay chance, no hay competencia posible”.

Hartmann remarcó la importancia del apoyo estatal y del INCAA porque “hace que el cine sea democrático” y permite el acceso a más realizadores, de manera que lo que termina pasando con medidas como las actuales es que los únicos que pueden hacer cine “son los ricos o sus hijos”.

Al ser consultado sobre la situación del cine independiente en este contexto, el director resaltó: “Siempre va a haber productores y directores dispuestos a hacer películas con fondos propios. Va a seguir habiendo audiovisual, es prácticamente una de las cosas más exitosas del presente y creo que tiene una buena salud a futuro, en sus diferentes formas y mutaciones”.

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En los grandes medios no se suelen escuchar las voces del conurbano, que todos los días luchan por sacar a la luz su arte audiovisual. Por eso, Cordón contactó a realizadores para analizar la gestión cultural del Gobierno Nacional en territorio bonaerense. “Nefasta”, “lamentable”, “violenta” y “fascista” fueron algunos de los adjetivos que las y los cineastas encontraron aplicables a la hora de dar definiciones.

“Antes ya teníamos poco apoyo del INCAA, porque la mayoría de las producciones estaban destinadas a Capital, y ya era difícil acceder a un subsidio, pero ahora es directamente imposible”, dijo Leandro Panei, el varelense productor y director de “Memorias fragmentadas” y el galardonado corto “¿Qué tal tu día hoy?”.

Panei obtuvo un reconocimiento en la última edición del Festival Internacional de Cine de la Provincia de Buenos Aires, realizado en octubre, por el guión de “La raza cósmica” en la competencia “Proyectos en desarrollo: ópera prima bonaerense”. Pero los meses pasan y aún no consigue financiamiento.

Algo en lo que la mayoría de los realizadores estuvo de acuerdo fue en distinguir y reconocer la gestión provincial, que se convirtió en un gran apoyo en el marco del desfinanciamiento del Gobierno Nacional. En este sentido, Sergio Cornú, director del documental “La Monteverde” y oriundo de Almirante Brown destacó la gestión municipal y provincial y las definió como “perfectas”. A su vez, la quilmeña Isabel Forcato, directora del corto “La madriguera”, resaltó: “Por suerte, en la provincia de Buenos Aires tenemos una gestión de gobierno que sigue apostando a la cultura, con financiamiento y apoyo a movidas culturales”.

A pesar de que el Gobierno no para de golpear y amenazar a la cultura nacional, las y los artistas son resilientes. Forcato destacó que en momentos así “es donde surge el under y la solidaridad”, y Panei coincidió: “Aumentó mucho el movimiento under del cine y del arte, se está haciendo más numeroso y más fuerte, que es lo normal en tiempos como este, porque el arte siempre resiste y empuja”.


*Isabel Escalada es estudiante de la Licenciatura en Periodismo en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ). Realiza contenido sobre cine en redes sociales, y es productora y co-conductora en «El escenario», programa de cultura de Radio Conurbana.