“No está bien burlarse de un chico por usar remera rosa, ni de una chica porque le gusta jugar al fútbol”, así te recibe un estudiante de primer año al entrar en la jornada sobre Educación Sexual Integral (ESI), repartiendo folletos que él, junto a sus compañerxs, armaron en clase durante la semana. Las hojas de carpeta dobladas en tres partes están adornadas con dibujos y frases cortas. “Nadie tiene que burlarse por lo que te gusta hacer”, es la frase que acompaña a los coloridos trazos que forman a una nena con la camiseta de Boca, jugando al fútbol, y un nene jugando con muñecas. “Si alguien se burla de vos por tu forma de ser, tenés que hablarlo con tu mamá, tu papá, un amigo o amiga, una maestra o con quien sea, pero hablado”, te recomienda el chico a la vez que entrega los panfletos a la gente que va llegando.

La escuela secundaria N°388 América Latina del barrio lomense de Santa Catalina trabajó en la Semana de la ESI un conjunto de exposiciones a cargo de sus alumnxs con proyectos de distintas disciplinas (radio, audiovisuales, textos, entre otros) abordando distintas temáticas como violencia de género, sexualidad o discriminación.

El patio se vistió de los colores de las maquetas y las infografías dibujadas a mano, mientras unas chicas presentan, a modo de radio abierta, las exposiciones a punto de comenzar. Cada aula preparó su stand, con un grupito de chicxs que explicaron lo trabajado y resolvieron las dudas de toda aquella persona que se acercó.

Las docentes que coordinaron la actividad explicaron que, si bien está reglamentado que entre el 26 y el 30 de agosto se deberían trabajar explícitamente los temas de ESI, ellxs logran abordar este tema durante todo el año en las distintas materias.

La importancia de trabajar constantemente con todas las problemáticas ligadas a la Educación Sexual Integral es fácil de apreciar si vemos los datos publicados por la Secretaría de Salud de la Nación, los cuales grafican que el 15%  de los nacimientos registrados en 2017 fueron de madres menores de 20 años, lo que se traduce a 116.952 casos. Lo trágico de esto es que la mayoría de estos embarazos no son deseados. Un estudio realizado por el Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva (OSSYR) en 2013 presentó que el 69% de los embarazos a esa edad son no deseados.

No sólo sexual, integral

Para que lxs chicxs comprendan mejor estas situaciones, la escuela trabaja estos temas abordándolos no sólo desde los aparatos reproductivos y los métodos anticonceptivos, sino también desde la sexualidad, las relaciones interpersonales y la violencia de género.

Un grupo de chicas de segundo año armó una variedad de juegos en los que, por ejemplo, se preguntaba cuánto sabe cada unx sobre las diversas identidades y orientaciones sexuales. Pegados contra una pared del colegio, hay una lista de palabras escritas en cartulinas de colores: transgénero, bisexual, homosexual, son algunas de ellas. Sobre la mesa, recortes de papel con descripciones para pegar junto a la palabra que corresponda.

En otro extremo del patio, un chico de tercero debate con el resto de sus compañerxs sobre cuándo una relación se tornaba violenta y/o peligrosa. Mientras, algunxs estudiantes se reunían a escuchar canciones viejas y actuales, leyendo las letras que fueron presentadas en unos afiches para analizarlas y cuestionarlas.

“Tomo y obligo” – Carlos Gardel

Y de celos me cegué
Y le juro todavía, no consigo convencerme
Como pude contenerme,
Y ahí nomás no la maté.

“Devuélveme el corazón” – Sebastián Yatra

Tú eras el amor de mi vida
Mi causa perdida
No quiero entender
Devuélveme el corazón
No quiero vivir así
Devuélveme las promesas y la vida que perdí
Devuélveme esa canción
La que con sueños escribí
Y llévate los recuerdos que me duelen más que a ti
Y aunque yo te amé sin razón
Devuélveme el corazón

En cuanto a la genitalidad, lxs alumnxs supieron ponerle color a la tarde con grandes maquetas de los aparatos reproductores y de los óvulos siendo fecundados, además de los afiches con el proceso de desarrollo del embrión y los nombres que lo representan en las distintas etapas del embarazo complementaron la información.

La maternidad deseada

Un pensamiento común es que lxs chicxs la tienen cada vez más clara y que tienen mayor facilidad para entender estos temas. No es algo comprobable. Sí es cierto que la sociedad avanza constantemente y los temas de los que se hablaban en una época no son los mismas que ahora.

Pero los problemas de fondo siguen existiendo, e incluso, algunos llegan a agravarse con el paso del tiempo. La provincia de Buenos Aires es un ejemplo claro de esto. Continuando con los números del OSSYR y la Secretaría de Salud de la Nación, en 2016, hubo un total de 387 nacimientos de madres de entre 10 y 14 años, y esta cifra aumentó un 52% con respecto al año siguiente, donde se registraron un total de 591 casos.

Los riesgos que las personas gestantes tienen al llevar adelante un embarazo a temprana edad afectan en varios puntos. Por un lado, a la salud. Se registraron 26 casos de defunciones maternas adolescentes en 2017. La provincia que más casos sufrió fue Buenos Aires con seis, de los cuales 3 ocurrieron en el primer cordón del Conurbano. Pero también, los embarazos en adolescentes traen consigo una gran complicación a la hora de llevar adelante los estudios. De hecho, se estima que el 30% de las chicas que abandonan los estudios lo hacen por embarazos y en pocas ocasiones logran retomarlos.

La importancia de contar

Dos situaciones totalmente opuestas que conviven en una misma realidad. Una gran cantidad de chicas que se ven obligadas a abandonar sus estudios a causa de un embarazo (muchas veces no deseado, muchas veces producto de una violación) y una gran cantidad de jóvenes muy comprometidxs con mitigar de a poco todos estos problemas. Y lo hacen desde su realidad, desde sus propias vivencias. Uno de los cursos se animó a escribir una canción para abordar la temática de violencia de género y fue rapeada por un grupo de chicxs frente al resto del colegio. “No es un amor sano. Él me maltrata y me quedo callada. No sé qué decir, no quiero ser golpeada. No lo aguanto más”, versa una de las estrofas cantada por la chica.

Uno de los ejes que atravesó a gran parte de los trabajos fue el de la contención hacia quienes sufren algún tipo de violencia. Así como en la canción una chica le comentaba a su hermano que necesitaba ayuda, cansada de ser agredida por su pareja, uno de los folletos repartidos en el primer stand dice bien grande: “No te quedes callado, hablalo con alguien”, haciendo referencia a la discriminación que lxs chicxs pueden sufrir por su identidad de género.

Caras de sorpresa aparecieron por todo el patio del colegio durante las horas en las que se efectuó la muestra. Algunxs se reían al ver algún dibujo o las maquetas, pero la risa duraba unos instantes. Rápidamente, las caras denotaban atención e interés por los temas que sus mismxs pares les explicaban. Preguntaban, acotaban y hasta debatían. Pero el asombro llegó incluso a las más grandes, a las maestras que, si bien manifestaron trabajar estas temáticas durante gran parte del año, no contenían su emoción al ver cómo lxs más jóvenes charlaban de estos temas con naturalidad, pero sobre todo, con información.

La ESI no es más que eso: información. Un aprendizaje exactamente igual al que se puede acceder en lengua o matemáticas. Negarle el acceso a la información a lxs chicxs es un peligro que lentamente lxs puede dañar. Del total de madres adolescentes registradas en el estudio del OSSYR, apenas un tercio completó la escuela primaria, y de ellas, dos tercios no terminaron la secundaria. La falta de conciencia sobre los temas abordados por la ESI alcanza a todxs, escolarizadxs o no. A medida que estas nuevas formas de relación y este aprendizaje lleguen a un sector más amplio de la sociedad, muchas estadísticas negativas comenzarán a revertirse.